De servicio
Optimizar
los tiempos en rodeos de cría.
El
objetivo principal de todo sistema ganadero es llegar a producir anualmente un
ternero por cada vaca. Para ello, productores y asesores veterinarios cuentan
con sólo 80 días para que la hembra recupere su actividad cíclica después del
parto y quede preñada nuevamente, pudiendo mantener el intervalo entre partos
de 12 meses.
Contemplando
que para lograr un mayor índice de preñez existen prácticas y herramientas de
bajo costo y gran efectividad, los técnicos de la Estación Experimental Cuenca
del Salado del INTA proponen repasar algunas pautas de manejo.
“Desde hace mucho tiempo el
servicio se estaciona en primavera – verano con el simple objetivo de lograr
hacer coincidir naturalmente la época de mayores recursos forrajeros (oferta de
energía) con el de mayores requerimientos por parte de los animales (lactación
– celo)” explican los profesionales del INTA.
El servicio estacionado (60
a 90 días) “permite ordenar el manejo, obtener un rodeo más homogéneo y así
ajustar el manejo a los requerimientos nutricionales de cada categoría y lograr
concentrar la parición; logrando destetar terneros uniformes y obtener mayor
precio de venta, llevar a cabo de manera organizada prácticas sanitarias”
(castración, tacto, vacunaciones, etc.), “permitiendo además realizar el descarte
y venta de vacas improductivas luego del tacto”.
Para lograr el objetivo de
obtener un ternero por vaca por año “es fundamental tener un lapso del mismo
destinado al servicio. Teniendo en cuenta que el período de gestación de la
vaca es de 285 días y el puerperio de 40 días quedan 40 días para que la vaca
pueda preñarse nuevamente dentro de los 365 días que dura el año calendario”
indican los profesionales.
Puntos a tener en cuenta en
el servicio:
Entre los aspectos a
contemplar en el servicio los técnicos señalan que “el estado corporal indica
el grado de reservas que tienen los vientres; da idea del nivel nutricional de
las vacas en el período previo al servicio”; por lo que “es importante que
lleguen al servicio con una buena condición corporal para afrontar el período
de mayores requerimientos del ciclo productivo; las vacas deben cubrir la
lactancia y además iniciar el celo y preñarse”. Para lograr los mejores
resultados los vientres “deben iniciar el servicio con una condición corporal
de 3 (de 1: flaca a 5: gorda) y en lo posible ganando peso (balance energético
positivo) durante el servicio”.
En cuanto a la duración
sugieren “que no supere los 90 días, teniendo en cuenta el ciclo estral del
bovino que es de 21 días de esta manera le damos 4 oportunidades a la vaca para
que se alce y sea servida”, por lo que “es recomendable un servicio de 90 días
como máximo”, teniendo en cuenta que “hay vacas cabeza de parición con
probabilidad de quedar preñadas antes”. Al respecto “se han realizado
experiencias en períodos de servicio más cortos (60 días) utilizado más en
vaquillonas de primer servicio, con buenos resultados, y para ello fue
necesario tener muy ajustado su nivel nutricional”.
Para lograr un servicio
exitoso “se sugiere utilizar un 3 % del total de vientres a entorar” y para
ello “deben entrar a servicio en perfecto estado de salud, por lo que lo ideal
es controlarlos antes del servicio y al finalizar el mismo” (julio-agosto), con
una revisación clínica (ojos, patas y genitales) y otra sanitaria, asegurándose
que estén libres de enfermedades reproductivas (raspajes) e infecciosas (TBC y
brucelosis).
En relación al estado
corporal los técnicos del INTA insisten en que los toros “deben iniciar el
servicio en buen estado corporal (CC: 3,5), es decir no gordos ya que deben
tener buen estado atlético para cumplir su función”. En tal sentido los
profesionales indican que “es conveniente realizar el servicio en la época de
mayor disponibilidad de recursos forrajeros para de esa manera las vacas puedan
expresar su máxima fertilidad; preñarse y destetar la mayor cantidad de kg de
ternero posible”, para lo que además recuerdan que “hay ciertas tecnologías que
pueden aplicarse para mejorar la concepción como el destete precoz,
suplementación y los tratamientos hormonales”.
La elección de la época de
servicio está condicionada por la época de mayor fertilidad de los vientres, lo
que llevará a tener mayor porcentaje de preñez, parición y destete. Por tal
motivo “es conveniente realizar el servicio en la época de mayor disponibilidad
de recursos forrajeros para que las vacas puedan expresar su máxima fertilidad;
preñarse y destetar la mayor cantidad de kg de ternero posible.
Una forma coherente de
medir la productividad es a través de la cantidad de kilogramos destetados por
vaca entorada.
Para mayor información:
Cuenca Norte CT –
Chascomús. Mitre 202. Chascomús.
Tel.
(02241) 436690
Referentes:
Med. Vet. Federico Plorutti -
E-mail: plorutti.federico@inta.gob.ar