Hágase la
luz…
Proyecto de biogeneración de energía eléctrica en el INTA.
El clima está
cambiando a nivel global y las producciones agropecuarias son las más
sensibles. La producción pecuaria y agrícola puede ser seriamente afectada en
las próximas décadas si no se toman las medidas necesarias oportunamente, y si
no se impulsan acciones de mitigación y adaptación requeridas. Este proceso de
cambio climático implica nuevos desafíos para toda la sociedad y muy
especialmente para aquellos vinculados a los procesos productivos agropecuarios
que, con la mejora del manejo, puede contribuir
a disminuir los factores de cambio.
Los nuevos
modelos productivos, y en particular el uso de cantidades cada vez mayores de
combustibles de origen fósil como el petróleo, están generando como
consecuencia cambios en el clima de todo el mundo. En la búsqueda de mecanismos
que permitan revertir esta situación, están surgiendo alternativas productivas
que contemplan la reutilización de desechos para la generación de energías renovables,
alternativas o limpias, entre las que se destacan la biodigestión, eólica,
hidráulica y solar.
Puesto que
el rol del Estado resulta fundamental para la investigación, promoción e
implementación de esta tecnología, desde el Gobierno de la Provincia de Buenos
Aires, por medio del Ministerio de Asuntos Agrarios de la Provincia de Buenos
Aires (M.A.A.) en conjunto con la Coordinación
Técnica de Cuenca Norte de la Estación Experimental Cuenca del Salado, se está
avanzando en la construcción de un Biodigestor experimental-demostrativo en la Chacra Experimental
Integrada Chascomús.
El
objetivo del proyecto está orientado a que “los productores en particular, y la
sociedad en su conjunto, tengan a su alcance una demostración de esta
tecnología y así avanzar hacia una implementación masiva, para dotar de
sustentabilidad ambiental la intensificación de las producciones agropecuarias”.
El
proyecto prevé la transformación de gas metano en energía eléctrica.
La
construcción se lleva a cabo mediante un “Programa de Incentivos a la
generación de energías distribuidas” (PROINGED) que el gobierno de la Provincia
de Buenos Aires impulsa a través de su Ministerio de Infraestructura y que es
financiado con fondos del Foro Regional Eléctrico de la Provincia de Buenos
Aires (FREBA).
Un
biodigestor en el tambo:
El
biodigestor está siendo construido en la unidad Tambo de la Chacra, siendo los
efluentes generados por esa unidad los que lo van a alimentar. El biodigestor
es el denominado de alimentación continua de tipo pistón, en el que según
explican los técnicos del INTA “la misma cantidad de efluente entrante será
igual a la cantidad de material biodegradado saliente, siendo este conducido
hacia una laguna de almacenamiento y maduración, para luego ser usado como
biofertilizantes en los cultivos”.
La
digestión se hará mediante temperatura controlada de entre 28 a 35ºC
(mesofilo), haciendo necesaria una cámara de precalentamiento y un sistema de
calefacción interna, alimentado por el mismo gas metano generado.
Para
poder recolectar al máximo el bosteo, se contará con una pista de alimentación,
en donde las deyecciones de las vacas se juntarán (mediante pendiente y barrido
en seco) en una fosa, para luego ser bombeada hacia el tanque de precalentamiento y posterior ingreso al
digestor.
De
acuerdo a lo proyectado desde el INTA “esta primera etapa de construcción,
funcionamiento y puesta a punto se continuará por una segunda etapa de
transformación de ese gas metano en energía eléctrica” y de ese modo “el uso de
los biodigestores, podría contribuir a reducir los problemas de contaminación
de las aguas residuales, contribuyendo a la sustentabilidad productiva a partir
de la mejora de la estructura del suelo, mediante la obtención de bioabono o biofertilizante
para aplicar a los cultivos.
Para mayor información:
EEA Cuenca del Salado – AER Chascomús Mitre 202. Chascomús.
Tel.
(02241) 425075 / 436690
E-mail: butler.lisandro@inta.gob.ar
Referente: Méd.
Vet. Lisandro Butler