Monte frutal de modalidad agroecológica
Los modelos de producción bajo
criterios agroecológicos contemplan el desarrollo de las comunidades a partir
del fomento de sus potencialidades sociales, culturales y económicas, en
armonía con su entorno ambiental y sus valores.
El Centro Educativo para la Producción Total Nº1 La Colonia, ubicado en “Colonia El Salado” en el partido bonaerense de Gral. Belgrano, es un establecimiento de alternancia en el que se trabaja para evitar el desarraigo de las comunidades rurales.
Como parte de un trabajo integral, desde el CEPT se busca construir espacios que permitan repensar los modelos de producción, para facilitar la vida a las familias rurales en el lugar que habitan. Mediante actividades de educación, formal y no formal, se promueve el desarrollo de las comunidades rurales fomentando la conformación de grupos de productores familiares y el asociativismo.
Reconociendo el pasado socio – productivo de la región el Centro Educativo impulsa un proyecto de producción de frutales con base agroecológica. Para su desarrollo se avanzó en la recuperación de un antiguo monte de plantas frutales ubicado en el viejo casco de la Estancia Santa Narcisa.
El proyecto se implementa en un espacio de unos 3000 metros cuadrados lindero a la granja escolar poliproductiva (huerta orgánica, vivero, producción de aves y cerdos, tambo y cría vacuna) donde se conjugaran las premisas básicas de la pedagogía de la alternancia con los pilares básicos del manejo agroecológico.
Un total de 90 plantas conforman el monte frutal implantado bajo las normas de la Agroecología, donde con prácticas culturales que aprovechan los procesos naturales y las interacciones en beneficio de los cultivos, se trabaja para reducir el uso de insumos externos como los agroquímicos y mejorar la eficiencia de los sistemas de cultivos.
El Centro Educativo para la Producción Total Nº1 La Colonia, ubicado en “Colonia El Salado” en el partido bonaerense de Gral. Belgrano, es un establecimiento de alternancia en el que se trabaja para evitar el desarraigo de las comunidades rurales.
Como parte de un trabajo integral, desde el CEPT se busca construir espacios que permitan repensar los modelos de producción, para facilitar la vida a las familias rurales en el lugar que habitan. Mediante actividades de educación, formal y no formal, se promueve el desarrollo de las comunidades rurales fomentando la conformación de grupos de productores familiares y el asociativismo.
Reconociendo el pasado socio – productivo de la región el Centro Educativo impulsa un proyecto de producción de frutales con base agroecológica. Para su desarrollo se avanzó en la recuperación de un antiguo monte de plantas frutales ubicado en el viejo casco de la Estancia Santa Narcisa.
El proyecto se implementa en un espacio de unos 3000 metros cuadrados lindero a la granja escolar poliproductiva (huerta orgánica, vivero, producción de aves y cerdos, tambo y cría vacuna) donde se conjugaran las premisas básicas de la pedagogía de la alternancia con los pilares básicos del manejo agroecológico.
Un total de 90 plantas conforman el monte frutal implantado bajo las normas de la Agroecología, donde con prácticas culturales que aprovechan los procesos naturales y las interacciones en beneficio de los cultivos, se trabaja para reducir el uso de insumos externos como los agroquímicos y mejorar la eficiencia de los sistemas de cultivos.
Dado que la producción de frutales
para la huerta familiar es un componente muy importante que tiene el programa
Prohuerta del INTA dentro de sus líneas productivas, la iniciativa del CEPT
compatibiliza los aspectos productivos y los sociales, con el compromiso de la
Experimental Cuenca del Salado, apuntando a recuperar saberes y sabores
surgidos de la tierra de la región.
Según explican los técnicos del INTA las tecnologías utilizadas tienden a incrementar la biodiversidad y la conservación de los recursos existentes, además de dar soporte a los sistemas agrícolas. Allí saberes ancestrales traídos por las familias vinculadas al CEPT van de la mano con las prácticas aplicadas por alumnos, docentes y técnicos, consensuando su accionar mediante un análisis crítico-reflexivo, que permite recuperar los saberes locales y la historia oral que da identidad a la comunidad y recupera los sabores de los “Dulces de Santa Narcisa”.
Para mayor información:
Según explican los técnicos del INTA las tecnologías utilizadas tienden a incrementar la biodiversidad y la conservación de los recursos existentes, además de dar soporte a los sistemas agrícolas. Allí saberes ancestrales traídos por las familias vinculadas al CEPT van de la mano con las prácticas aplicadas por alumnos, docentes y técnicos, consensuando su accionar mediante un análisis crítico-reflexivo, que permite recuperar los saberes locales y la historia oral que da identidad a la comunidad y recupera los sabores de los “Dulces de Santa Narcisa”.
Para mayor información:
Chacra
Experimental Integrada Chascomús (MAA-INTA). Mitre 202Chascomús.
Tel. 02241 42-5075 | 43-6690
Referentes:
Ing.
Agr. Enrique Goite | Maxi Bongiorno | Lic. en Biología Carla
Larrosa.
